lunes, 4 de julio de 2011

With nothing but your t-shirt on

 ¿Realmente eso es lo que se necesita para sentirse sexy?
No creo

Aunque eso, sin duda lo es.
Pero como también lo es una canción entre melodía y susurros de Carla Bruni, o como un uniforme de colegio que mezcla la inocencia de una niña con la sensualidad de una mujer. También un "no te vayas amor, quédate conmigo" o un italiano trajeado de ojos azul verdoso. 


La voz cascada de Cat Stevens. El doblaje de Marion Cotillard en las películas. Una buena colonia. La marca de un pintalabios rojos en una copa de champagne.

Pereza, con su estilo provocativo que nadie sabe muy bien de dónde pero le da un aire sensual. 
Las fresas con nata, el vino tinto, las cerezas, las manzanas rojas.
un baño de chocolate, un masaje en la playa, una guitarra
El pelo mañanero, la nueva colección de lencería de Calvin Klein, el fruncimiento de labios.
Sexy es un atardecer, una trenza deshecha, un cigarro a medio terminar, las huellas de unos pies descalzos en la playa.

Sexy es una sonrisa tímida, incluso la propia timidez. Un tatuaje en la muñeca. Un paseo en bicicleta. Bañarse de noche en la playa o en la piscina. Sexy es saltarse las normas de vez en cuando.


Un susurro al oído. El momento previo a un beso.



Colocarse el pelo detrás de la oreja, mirar de reojo, un hombro descubierto, ella con la camisa de él o incluso con su colonia.
En realidad en la situación que menos te lo planteas alguien te encuentra sexy.

¿Sabes lo que realmente creo? Lo que creo es que sólo hace falta que alguien te quiera para sentirse sexy. Que haya seis mil millones de personas en el mundo y que para esa persona por la que sonríes sin parar, tú seas la más importante, aunque sea por un segundo.


P.


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